Hay platos que no solo alimentan el cuerpo, sino también el alma. La fabada asturiana es uno de ellos. Su aroma, su caldito espeso, la textura suave de las fabes… Todo en ella sabe a hogar, a domingo en familia, a historias contadas alrededor de la mesa.
Y si crees que no tienes tiempo (ni ganas) de pasarte horas en la cocina, quédate, porque esta receta tradicional te va a enamorar. Y al final, te cuento un secreto para disfrutarla en solo 3 minutos… sin perder ni un gramo de autenticidad.
¿Por qué amamos tanto la fabada asturiana?
Más allá de lo rica que está (que lo está), la fabada tiene ese «no sé qué» que reconforta.
Las fabes: pequeñas, suaves… y poderosas
Las fabes asturianas —esas judías blancas grandes, mantecosas y delicadas— son una fuente natural de proteína vegetal, fibra, minerales como el hierro y el potasio, y vitaminas del grupo B.
Además, ayudan a cuidar la digestión, el colesterol y hasta la salud ósea.
Pero lo mejor es que están deliciosas.
Receta tradicional de Fabada con sofrito paso a paso
Aquí tienes nuestra receta casera paso a paso. No es difícil, pero requiere mimo y paciencia (como todo lo que realmente vale la pena).
Ingredientes para 4-6 personas
- 500 g de fabes asturianas (judías blancas)
- 200 g de lacón
- 200 g de chorizo asturiano
- 200 g de morcilla asturiana
- 1 cebolla grande
- 2 dientes de ajo
- 2 tomates maduros
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento rojo
- 2 zanahorias
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Pimentón dulce
- Agua
Paso 1: El remojo (sí, el de toda la vida)
Pon las fabes en agua fría durante al menos 12 horas (la noche anterior). Así evitarás que se rompan durante la cocción y quedarán suaves y tiernas.
Paso 2: El sofrito que lo cambia todo
Mientras las fabes se hidratan, prepara un sofrito de los que huelen a casa:
- Pica cebolla, ajo, tomates, pimientos y zanahoria.
- En una sartén con AOVE, sofríe primero la cebolla y el ajo.
- Añade el resto de las verduras y cocina todo a fuego medio hasta que estén tiernas y el tomate bien reducido.
Paso 3: Cocinar sin prisas
- Escurre las fabes y cúbrelas con agua fría en una olla grande.
- Lleva a ebullición.
- Retira la espuma y añade el lacón, el chorizo y la morcilla.
- Cuece a fuego bajo durante 2 horas aprox., sin remover (o se romperán).
Paso 4: El toque final
Cuando las fabes estén tiernas:
- Añade el sofrito.
- Cocina 10 minutos más para que todos los sabores se mezclen.
- Ajusta la sal y añade una pizca de pimentón dulce para el color y ese sabor inconfundible.
Y voilà. A disfrutar.
¿No tienes tiempo para cocinarla? Te entendemos
La buena noticia es que si hoy no puedes ponerte a cocinar, no tienes por qué renunciar a una fabada de verdad.
Antes de servir, ajusta el punto de sal al gusto y añade una pizca de pimentón dulce para darle un toque de color y sabor característico a tu Fabada Asturiana con sofrito.
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Sabe a la de casa, porque es como la de casa.
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